En 1747 se funda en París la École Nationale des Ponts et Chaussées. Tres décadas antes, se había levantado en Derby, Inglaterra, la primera fábrica textil de pisos moderna. Y también en Gran Bretaña, hacia 1750 comienza la rápida  expansión del mercado del hierro de East Shropshire, donde, Coalbrookdale, se proyecta y construye entre 1877 y 1781 el primer puente metálico del mundo. 

Por poner una fecha redonda, la ingeniería como profesión nace alrededor de 1750 y es en las obras construidas a partir de esa fecha en las que se centra el interés principal de este blog. Un interés que pondrá el acento en los momentos de innovación y cambio y que, en lo concreto, prestará atención a la producción de nuevos materiales por la industria y a las realizaciones de la ingeniería civil e industrial y de la arquitectura en el campo de las estructuras. 

Conocer es el paso previo para estimar y consecuentemente para preservar y transmitir lo más valioso de nuestro pasado. Este es el objetivo. Y, para hacerlo de un modo científico, es necesaria la mirada poliédrica sobre los bienes de la cultura industrial; la visión desde la ingeniería y la arquitectura, sí, pero también desde disciplinas como la historia, la geografía, la restauración y la museografía.